De cara a 1979, en Minarelli quieren
seguir contando con Nieto. La Bultaco no está aún a punto por lo que por ese
lado no hay problema, pero Ángel, consciente de que, cuando tuvo problemas
entró en Minarelli con el beneplácito de su piloto (Bianchi), decide hablar de
nuevo con él por si tuviera inconvenientes. Pierpaolo acepta y Nieto seguirá
con Minarelli toda la temporada.
A principios de marzo y pocos días antes de iniciarse el mundial, Nieto se desplazó al circuito del Mugello donde probó la moto con la que competiría en el mundial, la moto había sufrido una cura de adelgazamiento como se ve en la foto, conservando los colores de la temporada anterior, y mejorando su estabilidad, en cuanto al motor había sido mejorado, y el ingeniero Moller declaró con suficiencia, que solo le daría al campeón los cv suficientes para vencer sin hacer que el campeonato fuera aburrido.
Probando en Mugello Doc.Motociclismo |
La
primera carrera vuelve a ser en Venezuela, en el circuito de San Carlos. El año
anterior, la gran queja de los pilotos había sido el tremendo calor que
tuvieron que soportar. Nieto usó un casco integral sin visera complementado con
unas gafas de sol, lo que le ayudó a bajar bastantes grados la temperatura de
la cabeza. Para esta temporada utilizó una solución más completa que la
"chapuza" del año anterior y se presentó en parrilla con un casco
abierto tipo Jet. Antes de la carrera lo había probado en el circuito de
Turagua, donde confirmó que: "Ésto es una maravilla, es la solución a
ese gran problema que en San Carlos crean los integrales cuando la temperatura
de la cabeza se pone a más de 60º". Mientras el resto de pilotos
terminaban las sesiones de entrenos destrozados y empapados en sudor, Ángel los
terminaba caluroso, pero en magníficas condiciones. Asumía el mayor riesgo que
pudiera suponer usar un casco de ese tipo.
Los
entrenamientos fueron un tanto curiosos. El primer día se lo adjudicó
Palazzese, la tercera sesión fue para Nieto con dos segundos de ventaja y la
cuarta se le atribuyó al venezolano, con Lazzarini (que se caería lesionándose
y no podría participar en la carrera) segundo y Nieto tercero... a pesar de que
en su equipo le habían cronometrado una vuelta ¡tres décimas más rápida que la
pole!
En
carrera, Espié (Motobecane) salió en cabeza con Nieto segundo y el poleman
Palazzese retrasado. El venezolano iniciaría una remontada que le llevó hasta
la primera posición (superó a sus dos rivales en una apurada de frenada) y, una
vez ahí, mantuvo un ritmo elevado para intentar separarse de ellos, mas Nieto
no se separaba de él. Pero Palazzese tuvo que retirarse (por una mala ubicación
del tubo de respiración del depósito, éste hizo el vacío y dejó la moto sin
gasolina) dejando en cabeza al zamorano y al francés. Nieto se dejó superar por
Espié a fin de estudiarlo hasta que decidió lanzar un ataque, le adelantó y se
escapó en solitario hasta ganar con 6" de ventaja. El español se anotaba
el primer "15" (puntos para el vencedor) de la temporada.
La
siguiente carrera sería en el circuito austríaco de Salzburgring. Reaparecía la
Bultaco 125cc en manos de Tormo, pero aún con motor viejo no logró entrar ni
entre los 10 primeros confirmando la acertada decisión de Nieto de mantenerse
en Minarelli. Éste, no tuvo ningún problema para ganar la carrera con 10"
de ventaja respecto al segundo clasificado, Harald Bartol con su potente
Morbidelli. Igual que Tormo y Bultaco, en Austria reapareció Bianchi tras su
lesión de Imatra el año anterior, pero se vió obligado a abandonar. En solo dos
carreras, el Campeonato se ponía muy de cara porque con 30 puntos, tenía a sus
más inmediatos seguidores (Espié y Bartol) a 18.
Llegados
a Alemania, el escenario era el circuito de Hockenheim. Nieto llegó con gripe,
pero ni la gripe ni la Morbidelli de Bartol (la más rápida) ni el pilotaje del
austríaco le iban a impedir hacerse con la victoria. Tras la salida, se forma
un primer grupo con Bartol, Nieto, Espié, Lazzarini y Tormo pero poco iban a
durar juntos. La Bultaco de Tormo rompía un pistón, Lazzarini, resentido de una
caída en 50 (sufrida mientras luchaba por la cabeza con Tormo -que acabaría
abandonando con otro pistón roto- y que le causó un principio de conmoción
cerebral que no le impidió salir en 125cc 45 minutos más tarde) aflojaba el
ritmo para no correr riesgos, y Espié empezaba a sufrir problemas de
temperatura (por culpa de un conducto de agua) que acabarían provocando su
abandono.
Así,
la carrera quedaba en un mano a mano Bartol-Nieto. Y Nieto lo explicaba así:
"Cada vuelta que pasaba me daba más cuenta que la moto de Bartol corría
como la mía, ello me impulsó a tener que presionarle para ponerle nervioso. Le
empecé tanteando en las frenadas para saber dónde flojeaba y, en consecuencia,
donde le podria adelantar. Él empezó a ponerse nerviioso, sobre todo cuando yo,
aprovechando las 100 rpm que ganaba poniéndome a su rebufo, me emparejaba con
él y en plena recta -se va sobre unos 210 km/h- le tocaba con mi dedo índice en
la espalda para recordarle que estaba todavía detrás suyo. Empecé a ver que
estaba empañando la parte baja de la visera, síntoma ineludible de que estaba
cansado y muy nervioso, lo que le obligaba a respirar por la boca. Entonces me
la jugué un poco y en la última vuelta le pasé. Si no le hubiera adelantado
ahí, lo hubiera intentado en otro lugar que ya sabía que él siempre erraba".
Trabajada
victoria frente a un rival rápido que llevaba una moto rápida. Lazzarini quedó
quinto y Bianchi undécimo. Con 45 puntos, su rival más cercano era Bartol con
24 mientras que Lazzarini (11) y Bianchi (0) estaban muy cerca de descartarse.
El
Mundial llegaba a Imola para el 57º GP de las Naciones. Los entrenos mostraban
una mejora de la Bultaco, que en manos de Tormo se aupaba hasta la segunda
posición tras Nieto, pero una caída del valenciando en los entrenos de 50cc en
la que se rompía la muñeca derecha impediría el esperado duelo en carrera.
También se suponia un nuevo duelo del zamorano con Bartol, pero su moto rompió
en la segunda vuelta (a pesar de las sospechas, él no reconoció haber trabajado
en su motor para sacarle más potencia desde el último GP). Así parecía que las
cosas se le ponían muy claras pero no lo tuvo tan fácil porque Espié y
Massimiani intentaron impedir su victoria. Durante parte de la carrera
estuvieron intercambiándose las posiciones, llegando a liderar los tres la
carrera en el transcurso de una misma vuelta. Incluso el español y el italiano
llegaron a tocarse en una ocasión y, tras pedirse disculpas, ¡se volvieron a
tocar! Finalmente, el italiano, que se había roto una muñeca 15 días antes,
empezó a perder fuelle y Nieto le sacaría unos 4" a Espié hasta que el
francés forzó el ritmo, alcanzando de nuevo al español que aún pudo rodar más
deprisa y volver a escaparse. "Pensé que sin Bartol la cosa sería más
fácil pero no ha sido así, aunque a mitad de carrera me di cuenta de que
Massimiani estaba algo fatigado y no me exigía tanto".
En
el Jarama, tras unas primeras vueltas en un grupo de cuatro pilotos, Espié y
Nieto volverían a escaparse en cabeza con el francés mandando hasta que mediada
la carrera, el español se puso en cabeza y ya no la abandonaría hasta el final
ganando por escasamente un segundo de diferencia en un final bastante apretado.
Nieto dominaba el campeonato a base de ganar todas las carreras mientras que
sus rivales, además de no tener victorias, estaban siendo irregulares y dejaban
de puntuar demasiado a menudo. Así, mientras el español contaba con cinco
victorias, Espié solo tenía tres segundos y Bartol dos (ninguno de los dos
tenía más resultados que ésos). El rival más regular era Muller con cuatro
resultados, pero dos cuartos, un quinto y un octavo no se acercaban a las cinco
victorias.
Rijeka
sería la siguiente carrera y pese a que los tiempos de entrenos hacían prever
que Tormo podría inmiscuirse en la lucha por la victoria no fue así. La pelea
estuvo de nuevo entre Nieto y Espié con un nuevo triunfo del español, esta vez
por menos de un segundo y con diez más sobre el tercero (Dorflinger con
Morbidelli).
Se
volvía a Assen, un circuito-talismán para Nieto (y con los años, para muchos
otros pilotos españoles), y en él se viviría una nueva victoria, pero una
victoria distinta por cuanto el segundo clasificado (a menos de tres segundos)
sería Ricardo Tormo con la Bultaco. Ya en entrenos, los tiempos de Ricardo
indicaban que podría rodar con la cabeza y así fue. Espié hizo malos tiempos en
entrenos, su equipo sufría falta de recambios (La moto no tenía apoyo alguno de
la marca) y ello se traducía en que el piloto tenía que exigirse un poco más.
¿El resultado? Que mientras peleaba con Massimiani (primer piloto de MBA)
sufriría una grave caída que provocó rotura de tobillo y desplazamiento de
cadera. El rival más directo de Nieto dejaba a la fuerza la pelea por el
Campeonato. Nieto y Tormo en cabeza, intentaron correr con inteligencia. El primero
quería ganar pero no le interesaba jugarse el físico contra un piloto que no
era rival para el Campeonato y el segundo no quería estropear el mejor
resultado de la temporada tras haber perdido definitivamente el título de 50cc
esa misma mañana. Así las cosas, la duda estaba en cuánto aguantaría la Bultaco
y qué haría Nieto al final. El caso es que la Bultaco aguantó, Ángel dió un
pequeño tirón para evitarse sorpresas y Tormo se conformó con una esplendida
segunda posición. El título estaba bien apuntalado con 105 puntos (7 victorias)
frente a 48 de un Espié que estaría fuera de juego varias carreras y 35 de
Massimiani cuando quedaban 90 puntos por entregar.
Lo
que debía ser la siguiente carrera se convirtió en otra jornada histórica. Se
llegaba a un Spa-Francorchamps reformado, acortado y renovado pero el circuito
no estaba preparado. En la primera jornada de entrenos, se vió que el asfalto
no estaba en condiciones. Se había puesto solo una semana antes y se había
usado para el tráfico de camiones y demás maquinaria de la reforma del circuito
por lo que estaba impregnado de grasa y tierra. La segunda sesión de entrenos
no se disputó y, ante la promesa de la organización de limpiar la pista y
dejarla en condiciones por la noche, se decidió que se probaría el sábado antes
de la "tercera" sesión de entrenos. Y el sábado, tras una toma de
contacto de todas las categorías se constató que el piso seguía en mal estado y
que el riesgo era demasiado alto. Hubo una reunión de pilotos en la que debatió
el problema. Roberts dijo: "correr aquí es correr sobre hielo y
nuestras motos no son de ice-racing", alguien aseguró que los
organizadores no estaban de acuerdo y Ferrari dijo: "bien, tendremos
que colocar a cada uno de los organizadores de paquete en un side-car y les
damos una vuelta al circuito, a ver qué les parece". Las discusiones
siguieron hasta que se quiso poner a votación si se procedía a un boicot, ante
lo que Sheene alegó: "Ponerlo a votación popular lo único que
conseguirá es que los privados digan que correrán, ya que sus intereses y los
nuestros son totalmente diferentes", así que se llegó a un entente por
el que los pilotos partidarios del boicot firmarían una carta (escrita por el
periodista Barry Coleman) en la que se negaban a correr por motivos de seguridad.
La firmaron Roberts, Ferrari, Hartog, Tormo, etc cuando llegó Nieto y dijo que
"estamos haciendo el indio. No podemos dejar plantada a la organización
sin escrúpulos mañana, con 100.000 personas [nota de wxat:
en Spa, igual que en otros circuitos, gran parte del público se instala ya el
sábado y pasa la noche en el circuito o sus aledaños] esperando para vernos
correr. Tenemos que buscar otra solución, porque si no hay carrera, a quien le
haremos daño será a nuestro deporte y ello no debemos consentirlo. Una solución
sería no dar por puntuable la carrera, ya que así correríamos sin el riesgo de
tener que ir a la caza de los puntos, porque todos sabéis que no se corre con
la misma mentalidad cuando una prueba es del Mundial que cuando no lo es".
Roberts y Rossi no eran partidarios de esta idea, pero Nieto añadía "si
no corremos aquí por considerar que es peligroso, tampoco podremos correr ni en
Imatra, que se disputa dentro de tres semanas, ni en Brno, que son tanto o más
peligrosos que este circuito".
Al
final, los pilotos (excepto Roberts que, casi convencido, esperaba a ver el
resultado de la última reunión) aceptaron correr si la carrera no era
puntuable, pero una vez reunidos el Jurado Internacional (Jury) con una
delegación de cinco pilotos (encabezados por Roberts, Sheene y Nieto), el Jury
decidió que no iba a quitar la puntuabilidad de la carrera con lo que
sentenciaba la participación de los pilotos importantes. La organización
aumentó las primas de salida para presionar de alguna forma a los pilotos
indecisos, pero los pilotos más importantes optaron por firmar la carta y
renunciar a la carrera. Cuando la noticia llegó a los aficionados acampados en
el circuito se inició una revuelta que la policía se declaró impotente de
reducir. Se incendiaron balas de paja por todo el trazado, se intentaron
incendiar tribunas y se rompieron cristales. Pilotos que iban a pasar la noche
en el circuito, viendo como el clima de protesta y violencia aumentaba,
decidieron abandonar el paddock y sus vehículos fueron apedreados por la turba.
Este boicot fue el detonante del famoso proyecto de las World Series encabezado
por el periodista que redactó la carta del boicot, Barry Coleman, y por Kenny
Roberts, un proyecto que, aunque abocado al fracaso (y que costó practicamente
la carrera de dos pilotos como Virginio Ferrari y Greg Hansford por llevar sus
compromisos con estas series hasta el final mientras otros pilotos se guardaban
las espaldas firmando sus contratos) sirvió para que se velara más por la
seguridad en los circuitos y porque se aumentaran las retribuciones a los
pilotos (primas de salida y premios).
Después
de Bélgica llegaba Suecia, Karlskoga, pero antes, Nieto y Derbi quisieron
participar en una prueba no puntuable a fin de seguir el trabajo de puesta a
punto de la moto (con el trasfondo de la posibilidad de que la marca volviera
al Mundial -cada temporada que Derbi estaba fuera del Mundial se especulaba con
que su vuelta-) y con esta intención se dirigieron a Portugal, a correr en el
circuito urbano de Vila Real. El resultado fue una grave caída (a 130-140 km/h)
de la que el piloto resultó con fractura de la pelvis, del maleolo externo del
tobillo derecho y de la primera falange del quinto dedo del pie izquierdo. Esta
lesión podría haber comprometido mucho la temporada del español, pero... iba
líder con tanta comodidad que su título apenas corría peligro.
En
Suecia ganó Bianchi mientras Massimiani se veía obligado a la retirada, lo que
otorgaba automaticamente a Ángel Nieto su noveno título (Massimiani ya no podía
alcanzarle y Espié, que era el único que podría hacerlo seguía lesionado para
largo) y a Minarelli el de marcas. Además, a pesar de que las relaciones entre
marca y piloto se habían enturbiado (por un lado no gustaba que se hubiera
lesionado corriendo con otra marca una carrera no puntuable y por el otro no
gustaba que se prestaran sus motos a otros pilotos -como Kneubuhler-), ambas
partes firmaron una renovación para el año siguiente.
En
Imatra ganaría Ricardo Tormo con la Bultaco (en el último éxito internacional
de la marca, que al año siguiente ya no participaría oficialmente en el
Mundial), un triunfo que le costó afeitarse el bigote por una apuesta, y en
Silverstone, casi por sorpresa, reaparecía un Nieto renqueante, que apenas podía
caminar pero que quería evitar que volvieran a prestar sus motos a nadie y que,
contra todo pronóstico (sobre todo tras no entrenar el viernes bajo la lluvia
para evitar riesgos) se haría con la victoria por 18 centésimas sobre Bender y
Bertin a los que adelantó en la última curva.
Minarelli no fue a Brno, y en Le Mans, Nieto sufriría una caída cuando rodaba en segunda posición y todavía no estaba totalmente recuperado de su lesión. Pero la temporada terminaba con un título incontestable con ocho victorias (venció en todas las carreras en que terminó) y con más del doble de puntos. (120 por 53 de Massimiani) que el segundo clasificado. La sorpresa del final de temporada sería el sustituto de Espié (Rougerie se montó en Suecia, pero una incompatibilidad de sponsors y el hecho de no haber sido tan rápido como Thierry a pesar de sus 15Kg de menos, provocó que no siguiera con ella) en Motobecane, el joven francés Guy Bertin que se postulaba como un rival en potencia para 1980.
Minarelli no fue a Brno, y en Le Mans, Nieto sufriría una caída cuando rodaba en segunda posición y todavía no estaba totalmente recuperado de su lesión. Pero la temporada terminaba con un título incontestable con ocho victorias (venció en todas las carreras en que terminó) y con más del doble de puntos. (120 por 53 de Massimiani) que el segundo clasificado. La sorpresa del final de temporada sería el sustituto de Espié (Rougerie se montó en Suecia, pero una incompatibilidad de sponsors y el hecho de no haber sido tan rápido como Thierry a pesar de sus 15Kg de menos, provocó que no siguiera con ella) en Motobecane, el joven francés Guy Bertin que se postulaba como un rival en potencia para 1980.
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