El futuro de Nieto parecía tener un
objetivo claro: los 250cc. Pero no estaba tan claro como iba a llegar a él. A
pesar de que se suponía un contrato para hacer el cuarto de litro con la V2 que
estaba preparando Garelli, los rumores (de nuevo los rumores) le montaban
también en una Yamaha (con mejor preparación que la del año anterior) o incluso
en una Honda 250 (la marca había anunciado para 1984 la creación de una larga
serie de 200 motos carreras cliente punteras para vender a pilotos privados y
cabía suponer que alguno podria tener apoyo directo; a la hora de la verdad,
esas motos fueron un caro fracaso y ninguno de sus pilotos -Reyes, Gignabodet o
Simeon entre ellos- llegó siquiera a entrar entre los 20 primeros de un GP). A más
largo plazo, incluso se le vinculaba con Derbi, marca que había decidido volver
al Mundial aprovechando la instauración de la categoría de 80cc en lugar de
50cc y que valoraban poder hacer una 250cc en el futuro contando con un Nieto
que había manifestado que le gustaría terminar su carrera a los mandos de una
de sus motos...
Para
Nieto, tan amante de tomarse un descanso en cuanto se hacía con un título, la
intertemporada 83-84 estuvo muy ocupada. Aparte del Campeonato de España, Ángel
participó en la recuperada subida en cuesta de la Arrabassada (cita histórica
que se intentaba reinstaurar y que para la ocasión contrató la flor y nata del
motociclismo español del momento: Sito y Cardús, además del propio Nieto)
aunque de forma casi testimonial, pues solo terminó 15º.
Y
también participó de una experiencia gestada en la revista Solo Moto y
patrocinada por el periódico La Vanguardia para enviar un equipo español al
evento de las 200 millas de Daytona, en USA. La idea era lograr el primer
triunfo de un piloto español en los USA y para ello se hizo un equipo con
Nieto, Sito y Cardús para participar en la carrera de 100 millas (la carrera de
las 250) sobre una Yamaha el primero y un par de Kobas-Rotax los otros dos y
con Dennis Noyes y una Ducati Tecfar para participar en la batalla de las
Twins. La experiencia sería interesante pero no se saldó con buenos resultados
en carrera (los tres españoles salieron en primera linea) por problemas
mecánicos y por una caída de Sito al resbalar sobre una parte de la pista sucia
de arena cuando intentaba superar a un doblado mientras peleaba por la primera
posición con Wayne Rainey.
Mientras,
se confirmaba que Nieto iba a correr en 1984 en 250cc con Garelli. Pero la moto
no estaba a punto, no se esperaba que fuera competitiva hasta mitad de
temporada y por ello, se anunciaba que Nieto volvería a correr en 125cc como
escudero de Lazzarini. La puesta a punto de la 250 se confiaba mientras a Loris
Reggiani, que lo iba a compatibilizar con su participación sobre una Kawasaki
en el Mundial del mismo año. El último "implicado" era Gresini, que
perdía su segunda plaza en las 125 de Garelli hasta que Nieto la dejara libre y
que iba a empezar el Mundial a lomos de una MBA privada.
El
Mundial empezaba en Kyalami con las carreras de 250cc y 500cc pero Nieto no
participó porque la moto le llegó tarde de Daytona.
La
segunda carrera era en Misano e iba a resultar clave en el desarrollo de la
temporada. Tras los entrenos del primer día, el mejor tiempo era para Vitali
(MBA) con Lazzarini a un segundo y medio y Nieto, 15º, a 4". En Garelli
estaban preocupados y más cuando el segundo día la lluvia impedía mejorar los
tiempos por la mañana. Pensaban que sería imposible ganarle a Vitali y Nieto
les convenció de que le dieran libertad de acción (recordemos que figuraba como
segundo piloto) para no tener que quedarse detrás de Lazzarini y, cuando ya les
había convencido, exigió que esa libertad no fuera sólo para esa carrera sino
para todo el campeonato. En Garelli quisieron consultar primero con Lazzarini y
Eugenio no quiso/pudo exigir que el español se limitara a guardarle las
espaldas, con lo que le concedieron vía libre y así Nieto podía optar a todo.
En parrilla, Ángel parecía nervioso, incluso llegó a protestar por la que
consideraba excesiva distancia entre las diferentes líneas (salía 10º, segunda
línea) hasta que sus propios mecánicos le hicieron desistir. Salió mal, entre
los últimos (como casi siempre) pero en la primera vuelta ya era 10º, en la
segunda 6º y en la tercera ya estaba a unos 5" de los escapados Vitali y
Lazzarini. Recuperó terreno a ritmo de más de 1" por vuelta hasta
alcanzarles en la séptima y colocarse segundo en la octava. En ese momento, el
español intentó tirar de Lazzarini para irse los dos de Vitali pero como Eugenio
no podía dejar a Vitali, Nieto se escapó en solitario hasta alcanzar una
ventaja cómoda con la que gestionar la carrera. Y así hubiera quedado todo, con
la victoria, si no hubiera sido por unas declaraciones a la prensa de Maurizio
quien, sin conocer los entresijos de la escudería Garelli (Nieto pocas veces se
esforzaba a tope en unos entrenos, y en el papel de segundo piloto se esforzó
aún menos con lo que el 10º tiempo debió engañar al italiano) había dicho que:
"Este año Nieto bailará al son que yo toque". El español había
leído dichas declaraciones y en la última vuelta, en la recta de meta,
ralentizó el ritmo hasta ver venir al italiano y haciéndole gestos de que fuera
a por él y simulando tocar un violín, cruzó la meta con una engañosa ventaja de
poco más de un segundo.
En
250cc, tras un 18º puesto en entrenos, tuvo que retirarse de la carrera cuando
se rompió el embrague de su JJ-Cobas en el mismo día en que Sito Pons hizo el
ridículo más espantoso con la Yamaha carreras-cliente (que le había llegado
tarde, que era de estricta serie, que había roto dos motores en entrenos y que
no pudo poner a punto) hasta el punto de que se cayó cuando iba a ser doblado
llevándose al suelo al líder de la carrera. Éso supondría descartar la Yamaha y
recuperar las Kobas-Rotax.
Era
también el día de la que sería la última carrera de Ricardo Tormo, quien tuvo
que abandonar con un gripaje por culpa de un aro roto. Poco más de una semana
después, mientras probaba la Derbi por el polígono industrial de Martorelles (donde
se habían corrido carreras del Campeonato de España) con vistas a verificar las
mejoras de cara a la carrera del Jarama, sufrió un terrible accidente al
colisionar con un vehículo que comprensiblemente (eran las 20:30h, ya de noche
y en un polígono desierto) no se detuvo ante las señales que le hacían los
miembros del equipo que controlaban los cruces que daban acceso a la zona. El
parte médico explicaba que había sufrido "shock traumático, fractura
abierta del fémur derecho, con lesión de la arteria y de la vena femorales, con
parálisis del nervio ciático interno y externo, con atricción masiva de partes
blandas, fractura abierta de húmero derecho, fractura abierta de tibia
izquierda, fractura del cuello del fémur derecho y otras fracturas de menor importancia,
heridas, contusiones y erosiones varias". Las secuelas de esta
terrible caída forzarían a Ricardo Tormo a retirarse como piloto.
La
siguiente carrera fue en el circuito madrileño del Jarama. Nieto no saldría en
250cc el día en que Sito Pons logró su primera victoria mundialista. En 125cc
de nuevo salió mal, el 23, pero pronto empezó a remontar mientras Vitali se
caía en la primera pasada por Bugatti. Lazzarini tiraba en cabeza seguido por
Pietroniro (MBA) que aguantó poco a rueda. Eugenio se escapó en solitario
mientras Nieto llegaba a la segunda posición en la vuelta 10. Tiró hasta
alcanzar a su compañero, lo hizo y le superó en la penúltima vuelta aunque sin
conseguir escaparse, de modo que lucharon mano a mano hasta el final. Aunque
Lazzarini no pudo superarle en ningún momento entró a solo 18 centésimas del
español.
En
Salzburgring no se corría la categoría de 125cc y Nieto, recordando el affaire
del año anterior (cuando les multaron a él y a Tormo y descalificaron al
segundo) decidió no acudir a correr en 250cc.
La
siguiente carrera fue en el nuevo circuito de Nurburgring y allí, en Garelli,
le pidieron a Nieto que dejara ganar a Lazzarini para promocionar las ventas de
la marca en Italia. Ángel accedió pero no se conformó con renunciar a la
victoria así como así y jugó sus cartas con inteligencia. Se dió la salida y
Vitali se escapó en cabeza mientras, por una vez, Nieto salió bastante bien y
lo hizo quinto. Se mantuvo a rueda de Lazzarini mientras la ventaja de Vitali
era cada vez mayor hasta que con gestos consultó con los boxes qué hacer. Desde
allí le hicieron señas de que tirara a por Vitali y así lo hizo, limando
diferencias poco a poco hasta que en una curva, Maurizio tocó con el estribo al
suelo, cayó y se le incendió la moto. En ese momento, Ángel decidió plegarse de
nuevo a las órdenes de equipo (sin rendirse todavía) y bajó el ritmo hasta que
le alcanzó su compañero, se dejó adelantar y se mantuvo detrás suyo viendo como
desde más atrás se acercaban Cadalora, Gresini y Aunger. A falta de dos vueltas
le indicó por señas a Eugenio que tirara, que se estaban acercando los otros,
pero el italiano no conseguía aumentar el ritmo y en el penúltimo paso por
meta, de nuevo por señas consultó con los boxes desde donde le dieron la orden de
tirar para ganar la carrera. Así lo hizo, por delante de Cadalora (MBA) y
Lazzarini, quien no conseguiría retener la segunda plaza. Así las cosas, tras
la carrera Nieto habló con Garelli para que nunca más le propusieran/impusieran
que ayudara a ganar a un piloto que ni siquera había sido capaz de conservar la
segunda plaza. Y nunca más pasó.
"Hoy
Vitali era muy rápido y si no hubiera caído, las cosas hubieran sido muy
difíciles para mí. Luego he rodado un poco lento y he perdido el ritmo, al
final he tenido que atacar a fondo", diría Nieto tras la carrera.
Con
tres carreras disputadas, la diferencia entre los hombres de Garelli y los
demás (con MBA), empezaba a ser importante. Nieto tenía 45 puntos, por 32 de
Lazzarini, 16 de Caracchi, 13 de Selini y 12 de Vitali (que se proponía como el
más directo rival pero que con dos caídas consecutivas se mostraba poco
consistente) y Muller.
La
siguiente cita era en Paul Ricard, donde con una tercera Garelli, Gresini se
incorporó definitivamente al equipo oficial. Tras unos entrenos en los que
Nieto arrastraba una gripe y tampoco parecía estar muy contento con el equipo
(la maniobra de Alemania para favorecer a Eugenio, aunque les salió mal, no
gustó mucho al español) dejaron a Nieto a más de tres segundos del poleman
Lazzarini, por detrás incluso del nuevo delfín, de Fausto Gresini. Se rumoreaba
que, molesto con el equipo, Ángel se había hecho cronometrar en otra parte del
circuito para que nadie, ni Garelli, supiera realmente cual era su ritmo.
Cierto o no, la verdad es que los pronósticos obviaban esas diferencias en
entrenos y le daban como ganador. Por segunda vez consecutiva (tal vez como
muestra de su concentración extrema en estas dos citas) salió bien y encabezaba
un pelotón formado además por Auinger, Gresini, Muller y Selini mientras
Lazzarini, que había salido en mitad del pelotón, les remontaba a un ritmo de
casi tres segundos por vuelta hasta que en la cuarta les dió alcance. El
italiano se puso en cabeza y empezó a tirar fuerte mientras Ángel intentaba
tirar de Gresini para que se separara con él del grupo. Viendo que no conseguía
arrastrar a Fausto, decidió tirar en solitario en busca de Lazzarini. En este
esfuerzo logró la vuelta rápida de carrera (y nuevo record) rodando ¡4 segundos
más rápido que su mejor tiempo de entrenos! Auinger conseguiría seguirle de
cerca y ambos alcanzaron a Eugenio, empezando una pelea a tres que terminaría
en una llegada muy apretada con Nieto, Lazzarni y Auinger entrando por este
orden y separados tan solo por 63 centésimas.
"Antes
de salir estaba un poco preocupado por esos tres segundos que me faltaban, pero
los he encontrado. La culpa era un poco mía porque había rodado muy poco en
entrenamientos y la moto no estaba muy puesta a punto, botaba mucho; pero he
conseguido estar con ellos y ganar. Éso es lo que importa porque, incluso al
principio, como estaba un poco constipado, no pensaba que podría estar con
ellos. Creo que he demostrado que nadie me regala nada y que en Garelli todos
tenemos luz verde". Evidentemente, los manejos de Garelli para hacer
ganar a Lazzarini no habían salido a la luz pública y, de momento, no iba a ser
Ángel quien los aireara.
En
Rijeka no había carrera de 125cc, así que la siguiente cita era en el circuito
predilecto de Ángel: en Assen. Pese a quedarse a más de un segundo de la pole
(Auinger), pocos dudaban que volvería a hacerse con lo victoria, pero la
noticia de la mañana era la primera victoria mundialista de Aspar con la que,
diez años después, Derbi se anotaba otro triunfo en el Mundial. Esta victoria
en 80cc le daba al equipo la primera gran alegría después del grave accidente
de Ricardo Tormo.
En
125cc Pietroniro y Cadalora se pusieron en cabeza tras la salida, pero se
tocaron y se fueron al suelo. Muller tomó el mando pero pronto lo alcanzó Nieto
llevando tras él a Gresini y a Vitali. Lazzarini y Auinger también alcanzaron
al grupo, que estaba siendo ralentizado por Nieto con el objetivo de que
Gresini se escapara hasta que éste se cayó. Ángel se puso en cabeza a tirar,
seguido de Lazzarini y Muller mientras Vitali y Auinger se rezagaban y el
primero acababa rompiendo el motor. En el grupo de cabeza intentaba mandar
Muller, pero Nieto se puso delante, empezó a tirar más fuerte y el suizo se
pasó de frenada perdiendo muchas posiciones aunque lograría recuperar hasta la
sexta. Una vez solos los dos pilotos de Garelli, el español dejó que Lazzarini
tirara mientras lo controlaba para adelantarlo en la penúltima vuelta y
aumentar el ritmo para ganar con solo 1 décima de ventaja. El título estaba muy
de cara. A falta de 45 puntos por disputarse, solo Lazzarini con 56 podía aún
superar los 75 de que ya disponía Ángel. El resto estaban por debajo de los 31
mínimos necesarios para superarle, así que Muller (27), Caracchi (22), Selini
(21), Auinger (21), Kneubuhler (19) Gresini y Vitali (16) estaban sin opciones
reales de título. De hecho, con una victoria de Nieto en Silverstone sumada a
un séptimo puesto o peor de Lazzarini, el español conseguiría su enésimo título
mundial.
En
Spa no se corría la cilindrada de 125cc. Durante la segunda jornada de entrenos
de la categoría de 500cc, el piloto británico Kevin Wrettom sufrió un brutal
accidente que se agravó al perder el casco. Trasladado de urgencia al hospital
de Lieja se le apreciaron hemorragias internas en todo el cuerpo, fractura de
fémur, traumatismo craneal y las vértebras cervicales rotas. Fallecería el
jueves siguiente.
Se
llegó a Silverstone donde los entrenos dejaron a Nieto 7º a más de un segundo
de la pole de Kneubuhler, con cuatro MBA por delante de la primera Garelli. No
era muy preocupante porque eran tiempos del primer día, ya que el sábado llovió
y no pudieron mejorarse y porque se decía que Ángel se guardaba siempre uno o
varios ases en la manga. Pero las cosas no empezaron bien. El español tenía la
costumbre (desde que en los inicios de su carrera sufrió un accidente al
romperse un manillar) de probar en plena parrilla golpeando los semimanillares
para asegurarse de que estuvieran bien, pero en esta ocasión se le rompió uno justo
antes de tomar la salida. Sus mecánicos en parrilla le dijeron que no había
tiempo material para cambiarlo porque había que ir a buscar un recambio al
camión del equipo, así que él, con su inteligencia natural y con la sabiduría
que le daban sus años de carreras, decidió tirar en parrilla la caja de
herramientas para esparcer las mismas y que de esta forma no se pudiera dar la
salida a la carrera. Para aumentar el lío, saltaron a parrilla algunos
periodistas españoles e incluso pilotos de otras categorías (Cardús y algún
otro) de forma que con el consiguiente retraso en la salida, dió tiempo de
cambiar el semimanillar (aunque quedó flojo y tuvo que apretarlo a mano un poco
más durante las primeras vueltas). Pese a los nervios, salió en el grupo de
cabeza tras Auinger y Cadalora llevándose a Gresini a rueda mientras le daba
instrucciones/órdenes de forma visible y ostentosa. Lazzarini remontaba y se
unía a un grupo del que se empezaba a quedar rezagado Cadalora. Solo la MBA de
Auinger parecía aguantar el ritmo de las tres Garelli. Auinger tiraba en cabeza
mientras Nieto lo estudiaba y lo adelantaba para volver a cederle el liderato a
continuación. En la vuelta 10 Lazzarini rompió el motor (algunos italianos
hablaron casi de sabotaje y acusaban de que alguien en el equipo favorecía al
español...) y Auinger sufrío una espectacular caída con lo que los dos hombres
restantes de Garelli quedaron en cabeza. Viendo que en las últimas vueltas se
acercaban por detrás Kneubuhler y Selini, Nieto no quiso jugársela en una pelea
y se marchó en solitario dejando a Gresini pelearse con ellos dos. Ángel Nieto,
que tras el abandono de su compañero levantaba con emoción el puño cerrado a
cada paso por meta, ganaba la carrera con más de cinco segundos de ventaja y
conseguía así su 12+1º título mundial de motociclismo.
En
una entrevista explicaba: "Cuando he visto que Lazzarini ya no estaba
con nosotros, sabía que era ya Campeón del Mundo. Es un nuevo título que me
hace tanta ilusión como el primero".
Sobre
si le afectó el incidente en la salida decía: "En efecto, en la vuelta
de reconocimiento he roto un manillar. ¡Afortunadamente siempre los pruebo
antes de salir! Lo cierto es que le he dado un golpe y lo he partido. He tenido
que correr hasta el camión y traerlo hasta aquí, cambiarlo. He salido muy
nervioso".
Respecto
a su buena salida contaba que: "por fin he aprendido a salir. Ya he
salido entre los primeros en las últimas tres carreras. Lo cierto es que he
salido bien y me he llevado a Gresini conmigo, manteniendo a Auinger bajo
presión".
Y
sobre su carrera "dirigiendo" a Gresini apuntó que: "Gresini
es un piloto joven, con porvenir, pero aún le falta experiencia. Lo he querido
mantener conmigo, llevarlo a mi rueda. Cuando Lazzarini nos ha dado alcance
estábamos bien todos allí y yo controlaba. Luego, cuando Auinger se ha caído y
Lazzarini se ha retirado, he visto que Kneubuhler y Selini nos alcanzaban y
Gresini no seguía mi ritmo. Por esto me he ido, porque no quería que se me
complicaran las cosas sino amarrar el título ahora, ya".
Y
finalizaba la entrevista con un "Ya no voy a Suecia" que
dejaba claro que pensaba tomarse vacaciones y terminar ahí la temporada.
En
Anderstorp ganó su joven aprendiz, Fausto Gresini, seguido de Auinger, con
Lazzarini tercero y Vitali cuarto.
Para
el cierre de campeonato en Mugello, Garelli le pide a Nieto que corra. El
Mundial de marcas ya es suyo (con 105 puntos por 70 de MBA -la MBA de Auinger
está inscrita como Monnet Bartol- es imposible perderlo ya que solo se dan 15
por la victoria) pero quieren asegurar una victoria para la marca. Se rumorea
que es posible que tenga un gesto y ayude a Lazarini a conseguir el triunfo ya
que éste ha decidido retirarse al acabar el Campeonato y ganar el GP de casa en
su última carrera sería un colofón excelente a su trayectoria (con tres títulos
mundiales en el bolsillo). Vitali había realizado numerosos ensayos privados
preparando la carrera y desde el primer entreno se mostró fortísimo. El primer
día dejó a Auinger (2º) a casi dos segundos y al mismo Nieto (4º) a dos y
medio. Aunque el segundo día se redujeron las diferencias, de nuevo Vitali
mandó con Nieto (de nuevo 4º) a "solo" un segundo. Tras la salida,
las tres Garelli se ponen en cabeza con Vitali y Kneubuhler a rueda. Gresini mandó
unos instantes pero fue un espejismo porque en cuanto Maurizio se puso delante
con su MBA empezó a tirar para escaparse y solo Nieto (que estaba muy enfadado
porque el rumor de que ayudaría a Lazzarini se había convertido en una orden de
Garelli: dejar ganar a Lazzarini si era posible) pudo seguirle. El español se
puso delante en un par de ocasiones y parecía que se iba a repetir el guión de
otras carreras y que la estaba controlando a la perfección, pero no era así y,
como el mismo Ángel dijo, iba "más colgado que una mojama"
para mantenerse con el italiano hasta que en una curva el neumático trasero le
derrapó y sufrió una fuerte caída que en principio parecía sin más
consecuencias que tres puntos en un dedo y algunas magulladuras pero que
después, ya en frío, descubrió una rotura del astrágalo en el tobillo derecho.
Nieto había dado la vuelta rápida pero la victoria fue para Vitali, que le sacó
a Lazzarin 25,81 segundos de ventaja.
"Iba
colgado, apurando al límite. Vitali me estaba poniendo dificultades. Lo pasé
varias veces, pero él me cerraba y estaba dispuesto a jugárselo todo. Por ello
decidí intentarlo un poco antes del final, para no tener sorpresas y porque
creía que en la última vuelta me resultaría imposible. Entré en la curva más
fuerte de lo normal y la moto me dió un latigazo. El resultado ya se ha visto,
¡qué leñazo! Supongo que ahora todos se habrán convencido ya de que Ángel Nieto
no juega en las carreras, que ganar no es fácil y que debo arriesgar lo mío,
sudar de principio a final. Hoy las cosas no han salido bien ¡era la vuelta
13... y mi 13º título!", explicaba Nieto, quien añadía que "Yo
quería quedarme en Italia para comenzar a trabajar en serio con la Garelli 250
con vistas a la próxima temporada. No puedo decir si abandonaré 125 en favor de
la 250, esto lo haría si la nueva moto es del todo competitiva, pero en
cualquier caso considero que actualmente es casi imposible correr en dos
categorías".
El
miércoles siguiente fué operado de la fractura del tercer fragmento del polo
proximal del escafoides carpiano derecho y de la fractura del astrágalo tipo
2-3 del mismo lado. Su recuperación se estimaba en unos 50 días aunque
finalmente se alargaría por espacio de varios meses.
Pocos
días después saltó la noticia: Garelli iba a ceder sus motos de 125cc a la
Federación Italiana para crear una "Squadra Azzurra" dirigida por
Eugenio Lazzarini y que contara con jóvenes valores italianos (se daba por
hecho a Gresini, para el segundo puesto contaban Cadalora -que lograría el
puesto-, Caracchi -a quien ya le habían prestado una moto oficial en la carrera
de Mugello- y Gianola). De seguir en Garelli, a Nieto solo le quedaba la opción
de la 250cc (una moto que pese a que tenía que estar lista a principio de
temporada, no había participado en ninguna carrera, ni del Mundial ni del
campeonato italiano en todo el año) y su compañero de viaje sería su gran rival
de Mugello: Maurizio Vitali.
La
marca lamentaba la poca repercusión que tenían en Italia sus triunfos por el
simple hecho de conseguirlos con un piloto español (motivo por el cual
intentaron en varias ocasiones que Nieto le cediera la victoria a Lazzarini).
La prensa no solo no se hacia eco de sus resultados sino que casi obviaban en
sus informaciones la categoría de 125cc. Para lograr la repercusión deseada de
sus logros e intentar que se tradujeran en ventas, decidieron ceder sus motos a
la FMI. De esta forma se garantizaban ser noticia siempre.
Finalmente,
Ángel solo iba a correr en 250cc, haciendo equipo con un Vitali que declaraba:
"no me apetecía correr otro año con equipo privado y por ello, al
recibir la oferta de Garelli y saber que mi compañero sería Ángel Nieto, no lo
de dudado ni un momento. Siempre hemos sido unos rivales correctos y nunca ha
existido nada de particular entre los dos, por lo que no tiene porqué haber
problemas ahora que somos compañeros de equipo".
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